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Los adolescentes comparten encuentros semanales en el centro de salud del barrio Lote 111



Con múltiples actividades que son organizadas a partir sus propias inquietudes y necesidades, teniendo en cuenta las distintas edades que van desde los 11 hasta los 19 años.

Los jueves de cada semana, a partir de las 10 horas, el centro de salud del barrio Lote 111 ofrece un espacio destinado, principalmente, al cuidado de la salud mental de los adolescentes.

La actividad es una propuesta del servicio de salud mental de dicho que efector, que se encuentra en funcionamiento desde el mes de agosto de este año, con el objetivo de cuidar la salud mental de ese grupo etario y de promover entre los pares la igualdad y la socialización saludable. 

“Es a su vez, un espacio de escucha y acompañamiento, que surgió también a raíz de la puesta en marcha, este año, del consultorio de adolescencia en el centro de salud”, comentó la referente del servicio de salud mental del efector, la licenciada Andrea Valconte.

Mencionó que en un principio “fueron programados los encuentros cada 15 días, pero les gustó mucho a los chicos y de acuerdo a la demanda y a la concurrencia muy significativa, empezamos a hacer semanalmente”.

Actualmente, asisten aproximadamente 12 adolescentes “vecinos del barrio, que en general, fueron o son pacientes de nuestro servicio y los invitamos a participar. Pero también vienen, por ejemplo, hermanos de nuestros pacientes y se integran el grupo”, indicó.

En cuanto a las actividades que llevan a cabo en cada jornada, la especialista en psicología dio a conocer “vamos haciendo las actividades que ellos mismos nos cuentan que quieren hacer o nos proponen, teniendo en cuenta que trabajamos con distintas edades”.

“Pero a la vez, vamos organizando otras que le pueden resultar útiles en cuanto a las dudas que van expresando en las charlas que tenemos con el grupo. Cantan, tocan instrumentos, hacen actividad física con la práctica de algún deporte como fútbol y vóley, hacen juegos recreativos, pintan, dibujan, comparten testimonios”, añadió.

Seguidamente, puso de resalto que cada instancia tiene por finalidad “cuidar las emociones y los vínculos. Porque la salud no es solo el cuidado del cuerpo y el cuidado de la salud mental desde edades tempranas es fundamental”.

Remarcó, que, entre otros puntos, el espacio promueve “la igualdad de género en el trato, las relaciones sanas, la autoestima”.

Además “se tratan otros temas porque en los encuentros también colaboran profesionales de otras áreas y servicios, como: obstetras, trabajadores sociales, residentes de salud mental (RISaM) e inclusive estudiantes de psicología del último año de la carrera”. 

Expuso que se trata de un trabajo interdisciplinario “e interinstitucional” porque “desde hace unas semanas, se vienen sumando profesionales del Instituto IAPA y de Desarrollo Juvenil, que hacen su aporte a las distintas actividades que desarrollamos.

Por lo tanto, a la salud mental se suman otros temas como: educación sexual integral, prevención de embarazos no planificados, prevención de enfermedades de transmisión sexual, uso de métodos anticonceptivos. 

“Apuntamos a darles la información necesaria sobre diferentes temas, que conozcan sus derechos y el acceso a los mismos, entre los que destacamos los que tienen que ver con el cuidado de la salud. Y partir de eso, que ellos puedan decidir libremente”, aseveró la licenciada.

Para cerrar, Valmonte agradeció a todos los profesionales que ayudan para que el espacio se esté llevando adelante “en especial, a la directora del centro de salud, la doctora Maite Gómez, que nos da la confianza necesaria para que sigamos haciéndolo y sigamos creciendo para dar lo mejor a nuestros adolescentes”.