Una de esas grandes obras planificadas para proteger la salud y la vida de los formoseños
Por Justo L. Urbieta
En septiembre de 2007 cuando en el oeste se inauguraba en su totalidad el pavimento de la ruta nacional 81 entre Las Lomitas y el límite con Salta le consultaba a Gildo Insfrán que se sentía al contemplar ese emprendimiento que formaba parte de los sueños de varias generaciones de formoseños, lejos de aludir a su gestión señalaba que se estaba ante una obra que trasciende a los hombres.
Esa respuesta inteligente la aplico ahora cuando se está a punto de ingresar en la última etapa de ese otro proyecto humanista del Modelo Formoseño que ha sido el de la construcción del Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia “Doctor Néstor Carlos Kirchner”
El nombre del ex ´presidente de la Nación se repite en las realizaciones estratégicas para Formosa ya que fue él quien permitió que estos emprendimientos emblemáticos y estratégicos para la provincia y sus habitantes se llevasen a cabo al firmar con Insfran el 28 de mayo de 2003 el Acta de Reparación Histórica que hizo posible la dinamización del plan de obras contenido en el Proyecto Provincial.
Lo que se acaba de recibir es el valioso equipamiento que le permitirá al Centro, contiguo a las instalaciones del Hospital de Alta Complejidad, disponer de todo el potencial y herramientas tecnológicas para abordar las cuestiones de diagnóstico e imágenes, entre otros aspectos esenciales.
Se trata de instrumentos como un PET/CT y también la operación de un Ciclotrón que va a generar los radioisótopos relevantes para ese tipo de tratamientos.
El PET – sigla que se refiere a Tomografía de Emisión de Positrones- es una técnica diagnóstica no invasiva que permite tomar imágenes del organismo del paciente que muestran la actividad y el metabolismo de los órganos del cuerpo.
Para el caso, se utilizan sustancias marcadas radioactivamente que se distribuyen por todo el organismo.
El ciclotrón- que fue transportado en cuatro camiones y recibido por el gobernador- es un acelerador de partículas, es decir una máquina que usa campos electromagnéticos para desplazar partículas a altas velocidades. Permite la producción de radioisótopos, que a su vez se utilizan para fabricar un tipo de medicamento, llamado “radiofármaco” con el que es posible diagnosticar y tratar cánceres (los radioisótopos son como la materia prima de los equipos utilizados para diagnóstico).
El Centro fue inaugurado en diciembre de 2022 con la presencia del presidente Alberto Fernández, aunque ya funcionaba desde julio de ese año, habiéndose tratado ya de enfermedades oncológicas a 320 pacientes.
Se hizo realidad la posibilidad de que los pacientes oncológicos no tengan que viajar hacia otras provincias para tratarse, sufriendo desarraigo, alejamiento de sus familias y teniendo que suspender sus rutinas laborales.
Cuando se pongan en funcionamiento el PET y el Ciclotrón- aproximadamente en el término de un año- Formosa contará con la totalidad de las herramientas para tratar los padecimientos de los comprovincianos que soportan estas complejas enfermedades.
Un detalle importante es el saber que el 95 por ciento del plantel profesional es oriundo de esta provincia y que comenzó a capacitarse en centros especializados del país desde el año 2015.
Este proyecto humanista – que consolida la calidad del Sistema Público de Salud de Formosa- fue neutralizado por la administración de Mauricio Macri en 2018 aunque por decisión política del gobernador Insfrán la obra , aunque no al mismo ritmo que había adquirido con anterioridad con el aporte nacional, fue financiada con recursos del tesoro provincial.
El doctor José Rolando Granada- formoseño él- investigador de la Comisión Nacional de Energía Atómica y presidente de la Fundación Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia “Doctor Néstor Kirchner”, aguarda que esta institución no solamente satisfaga las necesidades de la comunidad local sino que también cubra las de los habitantes de las provincias vecinas e incluso a parte importante del Paraguay por su cercanía.
Espera que el Centro cubra efectivamente las expectativas y permita que la población encuentre soluciones cercanas sin tener que viajar a CABA u otras urbes del país, con el beneficio amplio que ello implica para los pacientes y también para el grupo familiar que tradicionalmente sufría los efectos del desarraigo para recibir atención integral ahora en su propia provincia.