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El enemigo no es la dirigencia ni Insfrán sino el coronavirus


Por Justo L. Urbieta

Gildo Insfrán regresó a la localidad de Cabo Primero Lugones a la que iba seguido en sus épocas de diputado provincial y vicegobernador ocasiones en las que pulsó las carencias extremas de esos parajes del noroeste del territorio y a sus pobladores a los que les prometió trabajar para que se integren definidamente al resto de la provincia y cuenten con los servicios esenciales que les permita tener calidad de vida.

El mandatario ha recorrido palmo a palmo Formosa y en ese recorrido habló con los habitantes, en su mayoría criollos y originarios, que soportaban todo tipo de limitaciones.

Esa fue la razón por la que este jueves al inaugurar la obra educativa 1393 de su gestión hizo notar que ahora se llega a Lugones utilizando la ruta 86 pavimentada; con servicio de energía eléctrica durante las 24 horas y conectividad digital derivada del soterramiento de 2.300 kilómetros de fibra óptica que hizo posible que en el momento más crítico de la pandemia- por lo desconocido del covid 19 y las medidas para combatirlo- los alumnos y estudiantes utilizaran esa vía para no perder la dinámica del proceso de enseñanza y aprendizaje.

Pero en Lugones , respondió a las expectativas de quienes esperaban un mensaje suyo después de los incidentes ocurridos hace una semana.

En tal sentido, sostuvo su determinación de hacer lo que la situación epidemiológica y aclarando que si bien es cierto tiene claro que no se trata de medidas simpáticas ni agradables pero que al estar por los resultados alcanzados hasta ahora son las más aconsejables para darle batalla al asedio viral.

Efecto de movilizaciones 

Mencionó a modo de ejemplo que hasta finales de 2020 solamente se registró un fallecido por coronavirus mientras que desde el inicio del presente año las movilizaciones continuas de las personas con motivo de las celebraciones de fin de año y que continuaron con el pretexto del cansancio y la fatiga causadas por las medidas restrictivas derivó en un incremento de casos, mayoritariamente en Clorinda y Formosa Capital.

Sobre todo, hizo hincapié en lo acontecido aquí en los últimos días con las manifestaciones y el accionar de los que incitan a la población a desoír las medidas que se toman desde los organismos oficiales.

Precisó, por ejemplo, que se hace caso omiso al uso del barbijo y al distanciamiento social, así como también a la organización de fiestas clandestinas.

Asimismo, citó a los bares que abren sus puertas a lo que considera como una franca provocación de dirigentes que habían estado ausentes de la escena pública desde 2020.

Gestión por obras 

Insfrán comunicó la gestión de estado cumplida paralelamente a la de la atención de la pandemia al resaltar que , como ocurrió desde hace casi un año, mantiene la opción por proteger la salud y la vida de los formoseños.

Aprovechó para opinar que la pandemia que está haciendo estragos en el mundo también ha permitido visualizar el rostro más siniestro de algunas políticas, así como también de algunos dirigentes políticos en coincidencia con la disputa por priorizar la economía o la salud, un dilema que generó la situación de desastre que se observa actualmente.

Aquí insistió en sus comparaciones respecto de los resultados : “en Formosa tenemos los mejores indicado en el sentido que esa realidad no lo pone exultante ya que para ello debe vacunarse, al menos, el 80 por ciento de la población formoseña.

Aprovechó para aclarar que en su reciente viaje a Buenos Aires no tuvo que ver con la búsqueda de una foto con el presidente de la Nación sino con la necesidad de darle prosecución a las diligencias para la reactivación de obras estratégicas incumplidas o paralizadas durante la gestión macrista y para presentar proyectos para nuevos emprendimientos.

En ese sentido mencionó que esos fueron los temas de la agenda metropolitana con Alberto Fernández y con dos ministros de su gabinete.

En su mensaje en Lugones no dejó de aludir a lo que comienza a verse en el contexto de pandemia provincial con motivo de que se transita un año electoral de medio término.

Y sobre el particular mencionó la aparición en escena de dirigentes de la oposición que pretenden dar cátedra acerca de lo que se debe hacer para controlar la situación sanitaria cuando la ciudad de donde proceden la política implementada es destroza.

Volvió a citar lo dicho en su mensaje del primero de marzo que evitaría la confrontación con sus comprovincianos porque la emergencia demanda al conjunto comunitario un accionar en unidad.

Por eso le pidió a los dirigentes locales identificados con los visitantes que traten de recapacitar ya que una modificación de la estrategia - que será sostenida-  podría generar una situación peligrosa hasta para ellos mismos.

Se colige que Insfrán no quiere que haya un desborde de casos que torne incontrolable la protección de la salud y la vida de los formoseños.

Único enemigo 

Y aquí fue cuando expresó lo que, de algún modo, dio sustento al título de esta nota : el enemigo no es Gildo Insfrán ni la dirigencia  sino el virus.

De allí partió un nuevo llamamiento para que se depongan todas aquellas cuestiones que puedan dividir y que se la unidad la actitud comprometida que se asuma en común para combatir al único enemigo que existe y que es el coronavirus.

No dejó de enviarles mensajes a los que al menos hace más de dos meses desde los medios nacionales se ensañan con Formosa y su gobierno para aclararles que no van a lograr sacarlo el eje que se ha trazado.

Eso significa que ello tiene que ver con la opción por la vida de cada uno de los formoseños.

Entiende que existe un claro propósito divisionista en el comportamiento de  sectores de la oposición nacional y provincial con un único objetivo electoral.

“A nosotros eso realmente no nos importa en esta situación de pandemia”, insistió categórico para admitir que no le temblará el pulso para tomar todas las decisiones que fueren necesarias para proteger la salud y la vida de los formoseños.

Entiende que la oposición continuará actuando con fines electoralistas por lo cual convocó a la población a estar preparada para defender el sistema de salud propio, sobre todo ante el desmejoramiento del cuadro epidemiológico observado en esta capital.

El gobernador reconoció que  el único trabajo a realizar en este momento es la preservación del estatus sanitario dejándose para más adelante  las cuestiones electorales .