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Gómez: “Controlar el virus depende de cada uno de nosotros”


Aníbal Gómez, el ministro de la Comunidad a cargo de Desarrollo Humano, brindó precisiones sobre la habilitación del nuevo sector de internación para pacientes COVID en el Hospital Central.  

Además, reiteró la función de los Centros de Asistencia Sanitarias (CAS) dentro del sistema de salud público y defendió las restricciones en el contexto de pandemia, porque “países que imponen medidas duras y puntuales, experimentan una mortalidad aproximadamente 25 veces menor”.

En este contexto, el funcionario comentó que este jueves, con el acompañamiento de la directora nacional de Epidemiología, la doctora Analía Rearte y la asesora de la subsecretaría de Integración de los Sistemas de Salud y Atención Primaria, Victoria Enríquez, quedó habilitado un nuevo sector de internación, exclusivo para pacientes COVID en el Hospital Central.

La nueva infraestructura de tres pisos cuenta con 42 camas de internación, de las cuales 14 están destinadas a la Unidad de Terapia Intensiva y el resto para pacientes con cuadros moderados. Además, Nación enviará 12 respiradores que serán destinados a este sector.

“Esta nueva infraestructura nos permite reforzar el sistema de salud público ante la crítica situación epidemiológica que estamos atravesando por la creciente detección de casos positivos de coronavirus en nuestra provincia”, subrayó el ministro.  

Pacientes en CAS 

En este orden, Gómez reiteró que en los CAS se tiene un control de los pacientes con coronavirus y su salud está monitoreada por especialistas.

Detalló que, “una vez que una persona da positivo por COVID, impacta en el sistema y rápidamente se comunican con el paciente para brindarle las indicaciones de cómo proseguir con el caso”.

En cuanto a los contactos estrechos de un caso positivo, refirió que pueden acercarse a un Centro de Salud y si la persona está con síntomas leves o moderados “indicamos quedarse en un CAS, y, en caso de que su condición requiera de más complejidad, pasa a una internación en un nosocomio”.

“Este jueves, más de 300 personas fueron trasladas a un CAS, y otro pequeño grupo a un hospital por las sintomatologías que presentaban”, informó.

Asimismo, marcó que “esta no es una enfermedad cualquiera, hay que analizar los riesgos de quedarse a transitarla en el domicilio, además es muy contagiosa y en la casa exponen a los integrantes de la familia al contagio. Un CAS protege a los contactos estrechos ya que aísla a la persona con COVID”.  

Ventajas frente al virus

En otra parte de su conferencia, Gómez argumentó que “según una investigación de la revista médica británica The Lancet, se demuestra que los países que optan por medidas de contención agresivas y tempranas sacan una ventaja frente a aquellos que van y vienen intentando convivir con el virus”.

En este sentido, manifestó que todos los gobiernos y con distintos matices, debieron optar entre elegir la vida o la muerte, la libertad o las restricciones.

“Del análisis se desprende que los países que imponen medidas duras y puntuales, experimentan una mortalidad COVID-19 aproximadamente 25 veces menor que la experimentada por los países que intentan convivir con el virus”, señaló.

A la vez, otro aspecto analizado fue el vínculo entre la erradicación del virus y las limitaciones de las libertades impuestas a las poblaciones: cierres de negocios, lugares culturales, restricción a la libertad de circulación, prohibición de reuniones, toques de queda, entre otros, buscando cuantificar la severidad de las decisiones dictaminadas por las autoridades.

La conclusión fue que los países que actuaron con menor rigidez para “vivir” con la pandemia, en general, tuvieron que imponer con el tiempo medidas que perjudicaron más, o durante más tiempo, las libertades. 

En cuanto a la inmunización, asegura que “la historia muestra que la vacunación por sí sola no puede controlar un virus rápidamente y que se necesita una combinación de medidas de salud pública para la contención”.

Por último, Aníbal Gómez indicó que “venimos repitiendo día tras día: controlar el virus depende de cada uno de nosotros, de nuestra conducta y responsabilidad como individuos y como comunidad”.