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Actual ciclo productivo. Más de 60 mil hectáreas sembradas en todos los estratos


Desde la cartera de Producción y Ambiente se destaco la  importancia de la siembra de maíz en la provincia en el esquema de diversificación productiva actualmente implementado. Entre la primera siembra y los cultivos de segunda que se están llevado adelante se estima superar las 60.000 hectáreas en el actual ciclo entre todos los estratos productivos. En el caso de los paipperos, estos superarán las 13.000 hectáreas sembradas con asistencia integral del gobierno provincial (semillas, productos fitosanitarios, preparación de suelos a través de los municipios entre otros beneficios).
Se significó además que el maíz permite a los productores que lo utilicen como forraje para los animales de granja, que consuman el choclo o vendan los granos. Los productores paipperos siembran hoy una gran diversidad de maíces, entre los que se destacan las variedades, los híbridos y el maíz amarillo.

Maíz en alza

El productor Walter Cococcioni, quien cerró una semana completando la trilla de sus 200 hectáreas de maíz sembrado a fines de agosto del año pasado, estimando que es uno de los primeros lotes que está saliendo en la provincia desde la zona de Villafañe. El maíz es justamente uno de los cultivos que se ha triplicado en cuanto a la superficie sembrada en toda la provincia.
Recuerda sus inicios hace poco más de una década y media con 4 hectáreas, y el ahora donde expuso que “estoy haciendo casi 200 hectáreas (unas 150 has de maíz colorado y las restantes 50 de maíz amarillo que la utilizo para hacer harina de maíz). Este fin de semana tenía pensando concluir con la trilla e iniciar de inmediato la siembra de otras 200 hectáreas.
“Nosotros rústicamente sabíamos algo del maíz, pero el ministerio de la Producción y Ambiente nos asistió con un profesional técnico y luego con la tecnificación como el aporte de esta trilladora que fue fundamental para que ampliáramos las hectáreas de siembra. Accedí a un crédito y con el aporte de profesionales más esta maquinaria, amplié el volumen de siembra”, expuso.
Revelo que “so tuviera que pagar me cobran dos mil pesos la hectárea, directamente no lo podía hacer, así que imagínese la gran ayuda del estado a los productores. Nuestro aporte es mínimo para el mantenimiento de la trilladora y quien opera la maquina, y eso hace que cierren los números y la actividad sea rentable”.
Dijo que al ser un productor con un volumen de siembra más importante pudo acceder a un financiamiento en condiciones favorables. Y destaco que “en el caso de los paipperos reciben semilla en forma gratuita, de otra forma no podrían sembrar maíz porque la bolsa sale unos $5000, o sea con diez hectáreas y la trilla posterior deberían pagar por ejemplo $70 mil, que es imposible que puedan hacerlo, por eso la decisión política del gobierno provincial es fundamental”.

Aporte a Nutrir

Una faceta distintiva señalado por Cococcioni es que en este momento complejo “poder colocar la producción de harina de maíz al Plan Nutrir que lanzo el gobierno es un importante espaldarazo en esto de darle valor agregado a nuestra materia prima. Tengo cuatro familias trabajando en la fábrica de harina de maíz, así que contribuimos a la economía local y al mismo tiempo a que gente que no la está pasando bien tenga un reaseguro alimentario con el plan de gobierno”.
Comento que realiza una tarea artesanal más allá de tener una maquina, señalando a modo de ejemplo que “todo el proceso de envasado lo hacemos manualmente, pero progresivamente llegaremos a industrializar íntegramente”.
El técnico del ministerio de la Producción y Ambiente destaca que junto al Instituto Paippa y el municipio se acompaña al productor durante todo el ciclo productivo. Desde el barbecho, la preparación del suelo, la siembra, las aplicaciones y durante la cosecha.
Expuso que se avanza “en el doble cultivo, una rotación de maíz-soja o viceversa, con lo cual el productor podrá tener dos cosechas al año y el número total le pueda cerrar”.
Aludió a los maíces cuya siembra arranco a fines de agosto, y más allá que en principio les falto algo de lluvia, luego la humedad acompaño y se han logrado lotes muy buenos con casi 6000 kilos de rinde por hectárea.