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El intendente de Pirane, Juan Zaragoza enripio su campo con recursos municipales

El intendente de Pirané aprovechó el fin de semana para enripiar el acceso a su campo, utilizando maquinarias y personal de la municipalidad, violando cualquier normativa que regula la función pública.

La propiedad está ubicada a unos siete kilómetros del casco urbano piranense. Durante este fin de semana se estuvieron realizando trabajos de remoción de suelo, recargado y un ripio que supera de lejos en calidad cualquier enripiado hecho en Pirané. Para todos estos trabajos, Zaragoza utilizó tanto maquinarias, como personal municipal, un acto que viola claramente lo estipulado en la Ley de Ética de la Función Pública, (Ley 25.188).

La mencionada ley habla en su CAPITULO II, “Deberes y pautas de comportamiento ético”, artículo 2 inciso G,“Abstenerse de usar las instalaciones y servicios del Estado para su beneficio particular o para el de sus familiares, allegados o personas ajenas a la función oficial, a fin de avalar o promover algún producto, servicio o empresa”. Sin embargo el jefe comunal parece desconocer esta normativa o hace oídos sordos a las legislaciones que limitan el accionar de quienes ocupan una función pública y abusa de los privilegios.

Desde la mañana del sábado, se podían observar varios camiones con las inscripciones “Municipalidad de Pirané” y máquinas retroexcavadoras como también la motoniveladora pertenecientes a la comuna piranense, trabajando para beneficio personal del jefe comunal.

Para el atardecer de domingo, cualquiera que circulaba por la ruta provincial 3, podía observar el flamante ripio de acceso al campo del intendente. El denso enripiado, a simple vista contiene mucha más piedras que las que se observan en la continuación de la avenida Pringles por ejemplo, uno de los últimos trabajos hecho por la comuna piranense, donde a poco de inaugurar fueron varios los vehículos que terminaron en la banquina tras deslizarse todo el material aflojado tras las lluvias, lo que denota la precariedad en las tareas.

Los recursos del municipio, son bienes que pertenecen a los Piranenses y está expresamente prohibido que los funcionario públicos los utilicen para un fin personal, sin embargo no sería la primera vez que Zaragoza obra de esta manera, ya que según testigos, poco tiempo después de asumir su cargo al frente de la comuna piranense, se pudo ver un notable crecimiento en el inmueble. Se colocaron luminarias casualmente similares a las que la municipalidad utiliza en diferentes sectores e incluso hay quienes afirman que las luces que se reemplazaron por otras “nuevas”, fueron a parar al mismo campo.

A poco tiempo de haber asumido su cargo, Zaragoza había asegurado que tenía planeado realizar al menos cincuenta cuadras de asfalto”, y en caso de no llegar a ese objetivo decía que su gestión “sería un fracaso”. Un objetivo que parece ser ya al menos difícil de conseguir, estamos transitando el 2019, y al momento la municipalidad no logro siquiera una de las cincuenta cuadras del ansiado asfalto.