El vicegobernador Floro Bogado conmemoró los 137 años de Formosa
"Los mejores pasajes de nuestra historia se gestaron con nuestro frondoso capital nativo" sostuvo el mandatario.
El vicegobernador Floro Bogado expresó a 137º años de la fundación de Formosa que “aquí, donde empieza la patria ya podemos palpar fecundas realizaciones que responden a muchos de los anhelos de nuestros mayores, quienes desde los momentos fundacionales aportaron al crecimiento de nuestro hogar común y amalgamaron una forma de ser, de sentir y de ver el mundo como una identidad pluriétnica y pluricultural.
Señaló que “todos heredamos ese ejemplo estoico, generoso e inspirador de los colonos, los criollos, los soldados de línea, de los aborígenes y de las distintas generaciones, por lo tanto, la mejor forma de honrar a nuestros predecesores es nutriéndonos de sus ejemplos y de estimular día a día ese frondoso sustento espiritual sembrado, aprendiendo a vivir en armonía con nuestros comprovincianos y con la naturaleza que nos rodea, tan semejante a la poesía por su aroma de jazmines magnos y por el ímpetu de su sol implacable, por sus lapachos, palmares, monte y ríos de pájaros y aves (que es lo que significa en quechua “Pilcomayo” -Pilco: aves y Mayu: río-), verdaderos tesoros de nuestro patrimonio natural resaltó.
Añadió el doctor Bogado, que siempre le gusta conmemorar nuestra fundación así, como un canto a los hombres y mujeres que con su participación y esfuerzo cultivaron esperanzas y raíces firmes, y nos marcaron un derrotero de aspiraciones a seguir. Indicó que “la Formosa de hoy requiere de este espíritu en un tiempo de nuevos desafíos y de transformaciones que apenas podemos asir, para que siga latiendo con la fuerza y la calidez de nuestra cultura y del amor, más al ritmo del sueño de integración y unidad continental que trasciende nuestra frontera que al ritmo de la tecnología y del materialismo deshumanizantes, como lo han interpretado nuestros próceres, pues se trata de extender nuestros brazos fraternales desde donde nace la Patria Chica hasta donde culmina la Patria Grande de Hermanos”.
Enfatizó que su deseo ferviente es que este nuevo festejo fortalezca esos nobles ideales en todos los jóvenes y en todas las generaciones formoseñas para hacer realidad nuestro hogar grande, comúnmente llamado ñande roga guazú, en la gran aldea que es nuestro mundo de hoy, para que nos cobije y hermane a todos los que habitamos en este bendito suelo, y en esta bendita tierra de ensueño que nos sigue deslumbrando con su entraña vegetal desde el Pilcomayo hasta el Bermejo, concluyó.-
Señaló que “todos heredamos ese ejemplo estoico, generoso e inspirador de los colonos, los criollos, los soldados de línea, de los aborígenes y de las distintas generaciones, por lo tanto, la mejor forma de honrar a nuestros predecesores es nutriéndonos de sus ejemplos y de estimular día a día ese frondoso sustento espiritual sembrado, aprendiendo a vivir en armonía con nuestros comprovincianos y con la naturaleza que nos rodea, tan semejante a la poesía por su aroma de jazmines magnos y por el ímpetu de su sol implacable, por sus lapachos, palmares, monte y ríos de pájaros y aves (que es lo que significa en quechua “Pilcomayo” -Pilco: aves y Mayu: río-), verdaderos tesoros de nuestro patrimonio natural resaltó.
Añadió el doctor Bogado, que siempre le gusta conmemorar nuestra fundación así, como un canto a los hombres y mujeres que con su participación y esfuerzo cultivaron esperanzas y raíces firmes, y nos marcaron un derrotero de aspiraciones a seguir. Indicó que “la Formosa de hoy requiere de este espíritu en un tiempo de nuevos desafíos y de transformaciones que apenas podemos asir, para que siga latiendo con la fuerza y la calidez de nuestra cultura y del amor, más al ritmo del sueño de integración y unidad continental que trasciende nuestra frontera que al ritmo de la tecnología y del materialismo deshumanizantes, como lo han interpretado nuestros próceres, pues se trata de extender nuestros brazos fraternales desde donde nace la Patria Chica hasta donde culmina la Patria Grande de Hermanos”.
Enfatizó que su deseo ferviente es que este nuevo festejo fortalezca esos nobles ideales en todos los jóvenes y en todas las generaciones formoseñas para hacer realidad nuestro hogar grande, comúnmente llamado ñande roga guazú, en la gran aldea que es nuestro mundo de hoy, para que nos cobije y hermane a todos los que habitamos en este bendito suelo, y en esta bendita tierra de ensueño que nos sigue deslumbrando con su entraña vegetal desde el Pilcomayo hasta el Bermejo, concluyó.-
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