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Atenciones integrales de salud en comunidad rural



Vecinos de la comunidad rural de Santa Marina, emplazada hacia el sureste de la geografía provincial,  fueron beneficiados con el trabajo conjunto del personal sanitario del centro de salud local, más un equipo del hospital de Villafañe, situado a unos 14 km, que se trasladó hasta allí para fortalecer las acciones que concretan sus colegas diariamente.
De este modo, mediante un nuevo operativo sanitario: bebés, niños, y adultos  recibieron respuestas mancomunadas a sus demandas de salud. “El hincapié de los controles fue puesto en las atenciones fue asimismo para las embarazadas y pacientes  con enfermedades de base”, explicaron los referentes médicos, agregando que al mismo tiempo “dimos consejos sobre hábitos saludables y conductas que apuntan a cuidar la salud y evitar enfermedades”.
El equipo estuvo conformado por médicos, enfermeros, obstetras y vacunadores que ofrecieron atenciones y consultas desde cada una de sus especialidades, explicando que “estas tareas conjuntas se efectúan periódicamente recorriendo los efectores de pueblos, parajes y localidades que se encuentran en el área de cobertura para facilitar a los vecinos el acceso a los numerosos servicios y prestaciones de salud que están disponibles de forma gratuita”.
A lo largo de la extensa jornada se cumplimentaron controles como: medición de de peso y talla, evaluación nutricional a todos los pacientes “haciendo hincapié en los niños menores de 6 años y embarazadas”, informaron.
“Se registró también la presión arterial, latidos cardíacos” y otros exámenes clínicos y físicos “que se determinan según la edad y condiciones específicas de salud, como el caso de los pacientes con diabetes, hipertensión y enfermos cardiovasculares, entre otros”.
Los obstetras realizaron controles prenatales estrictos “de acuerdo a lo que se establece para cada trimestre de gestación”. A esto fue sumada la programación de turnos para estudios complementarios como “análisis de laboratorio, ecografías” y la captación de nuevas embarazadas “para iniciar los controles respectivos y la apertura de su ficha prenatal donde se asientan todos los datos relevados hasta el momento del parto”.
Como parte de las tareas, se controlaron igualmente los carnets de vacunas aplicándose las dosis faltantes por grupo etario y determinaciones especiales del calendario vigente “que destina varias de las vacunas a pacientes que padecen ciertas afecciones, reforzando así la protección a su sistema inmunológico”. Y se dieron charlas para concientizar a los integrantes de las familias sobre hábitos que fortalezcan la salud y el sostenimiento de una buena calidad de vida. Entre ellos se remarcó la alimentación saludable, el lavado de manos, los controles médicos y odontológicos, limpieza del hogar y sus alrededores, y el aseo personal.
Sobre el final, fueron entregados medicamentos –según las indicaciones de las recetas médicas- para el cumplimiento de los tratamientos de patologías detectadas y para la continuidad de afecciones crónicas.  Seguidamente, fueron suministrados cajas de leche para niños y embarazadas, más suplementos nutricionales y alimentarios “también recetados”.