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Día Mundial contra el cáncer de colon: impulsan la detección temprana

Dado que en todo el mundo se conmemora este sábado la lucha contra el Cáncer Colorrectal (CCR). Según indica la Organización Mundial de la Salud (OMS) “el cáncer de colon y recto tiene tasas elevadas de curación si es detectado a tiempo y tratado de acuerdo con las prácticas óptimas”.
Es por eso que desde el Hospital de Alta Complejidad “Presidente Juan Domingo Perón” los especialistas hacen hincapié en la prevención de esta enfermedad de riesgo, que suele ser asintomática hasta que su estado es ya muy avanzado.
De acuerdo a los datos aportados por el Instituto Nacional del Cáncer (INC), "el CCR es el tercer cáncer más frecuente en Argentina, detrás del cáncer de mama y próstata.
Por lo general este tipo de tumores malignos aparece a partir de los 50 años, momento en que las personas deben estar alertas y realizarse los estudios correspondientes para detectarlos a tiempo.
Los profesionales hacen un llamado a las personas entre los 45 y los 50 años, a realizarse chequeos anuales como la colonoscopia, que permiten detectar cualquier anomalía en una fase temprana, cuando el paciente puede responder mejor al tratamiento.
El cáncer colorrectal se presenta cuando hay un crecimiento y multiplicación descontrolada de células patológicas en el intestino grueso. La afección podría iniciar con la formación de pólipos benignos que lentamente se van convirtiendo en tumores malignos, cuyo crecimiento puede llegar a causar la obstrucción intestinal.
Entre los diferentes factores de riesgo que intervienen en el desarrollo de estos tumores están la edad, los antecedentes de enfermedad inflamatoria intestinal, o familiares que hayan tenido cáncer.
Sus principales síntomas son ciertos cambios en el ritmo intestinal: diarrea o constipación pertinaz, sangrado y/o cambio de consistencia en las heces, dolor abdominal, pérdida de peso sin causa aparente, cansancio, pérdida de apetito, vómitos. Ante cualquier antecedente se debe consultar al médico.
La prevención primaria está relacionada con los siguientes hábitos: consumir una dieta rica en fibras, especialmente vegetales y frutas, disminuir el consumo de carnes rojas y grasas de origen animal, ingerir productos ricos en calcio (lácteos), realizar ejercicio físico regularmente y evitar el sobrepeso y disminuir el consumo de bebidas alcohólicas y evitar el tabaco.